viernes, 4 de enero de 2019

Nuestro Serio Dilema Ambiental


Nuestro Serio Dilema Ambiental

En su discurso del 1 de mayo del 2015, el ex Gobernador de Misiones Maurice Closs no plante un serio dilema ambiental y nos puso en una situación en la que  no se sabe cuál de ellas escoger porque ambas son igualmente buenas o malas.

Propuso instalar un debate franco, sin hipocresía e intentar encontrar alguna forma de compensación al tamaño esfuerzo de los propietarios tierras en particular y el de todos misioneros en general,  por las fuertes limitaciones del uso de sus tierras amarradas a  la Ley Nacional  26. 331 “de protección ambiental de los bosques nativos que el “Estado Nacional” no cumple.

En el mismo texto el ex gobernador nos propuso un ejercicio de lógica económica que nos da una suma de $26.000  mil millones anuales (A proxi. 2.600 millones de Dólares de entonces), que la economía de la Provincia deja de percibir por improductividad.

Sobre esa base y antes de pasar al texto del ex gobernador Maurice Closs para luego debatir sobre este asunto, yo también les propongo un simple ejerció de lógica económica y social: Con esa suma de dinero actualizada ¿Cuantos hospitales, universidades, escuelas, jardines maternales e infantes, comedores y merenderos podríamos construir y sostener en Misiones?
Espero que el pueblo misionero se calce los guantes y defienda lo que es suyo. 
Omar Aouada
Fragmento del discurso del ex gobernador de Maurice Closs

Nuestro Dilema Ambiental

Quiero expresar la enorme contradicción que siento toda vez que escucho hablar del dilema economía/ecología. Todos en el mundo se llenan la boca diciendo que hay que cuidar la selva, pero pocos lo hacemos. A la hora de decidir siempre la economía gana y quienes cuidamos el medioambiente nos quedamos esperando que alguien y de alguna forma compense con recursos las inversiones que hacemos para cuidar nuestra selva, y la plata que dejamos de percibir por tener más un millón de hectáreas protegidas.

Les propongo un ejercicio de lógica económica: Qué pasaría si transformáramos ese millón de hectáreas en 300 mil hectáreas de yerba y 700 mil de desarrollo silvopastoril.

Produciendo 15 mil kilos de Yerba Mate por hectárea tendríamos 18 mil millones de Pesos de ingresos anuales.

Si cortáramos 50 mil hectáreas de pino por año de las 700 mil, generaríamos ingresos de 6.500 millones por año.

Si produjéramos 600 mil cabezas de ganado bajo el pino, tendríamos
ingresos por 2.100 millones de Pesos.

Si sumamos estos valores el ingreso anual podría ser de 26.600 millones de Pesos. Y la verdad que por la ley de Bosques apenas recibimos 3 millones de Pesos por año por alguna compensación bizantina.

Orgullosos de nuestra selva, cuidándola, tenemos que instalar este debate, para terminar con la hipocresía e intentar que de alguna forma se compense tamaño esfuerzo de los Misioneros.

1/05/2.015.